Mary McGee, pionera indiscutible del motociclismo y protagonista del documental Motorcycle Mary, nominado al Oscar, falleció a los 87 años el pasado 27 de noviembre en su residencia de Gardnerville, Nevada, según informó su familia. Su muerte, causada por complicaciones de un derrame cerebral, ocurrió apenas un día antes del estreno mundial del cortometraje en el canal de YouTube de ESPN, bajo la producción ejecutiva del siete veces campeón de Fórmula 1 Lewis Hamilton.

Un legado forjado sobre dos ruedas
Nacida en Juneau, Alaska, durante la Segunda Guerra Mundial, McGee rompió barreras en un deporte dominado por hombres. Animada por su hermano y entrenada inicialmente en automovilismo, la expiloto dio sus primeros pasos al volante de un Porsche Spyder, logrando varios triunfos en los años 60. Sin embargo, sería sobre dos ruedas donde dejaría una marca indeleble: en 1975 se convirtió en la primera persona en completar en solitario la extenuante Baja 500 en México, un hito que precedió la era del Rally Dakar.
Su carrera la llevó a ser la primera mujer en competir en motocross en Estados Unidos, además de obtener patrocinio de grandes marcas y participar en campeonatos internacionales. Fue nombrada leyenda por la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) en 2012 y, años después, incluida en el Salón de la Fama del Motociclismo de la AMA.



Inspiración para generaciones
El documental Motorcycle Mary, dirigido por Haley Watson y producido también por Ben Proudfoot, dos veces ganador del Oscar, explora la vida de McGee, desde sus inicios hasta sus logros más destacados. “Descubrir su historia en 2022 fue el comienzo de un viaje para entender la magnitud de su impacto en el deporte y en la vida de tantas personas”, comentó Watson tras conocer la noticia de su fallecimiento.
Lewis Hamilton, quien también participó como productor del filme, rindió homenaje a McGee en sus redes sociales: “Estoy profundamente entristecido por su partida. Fue una pionera en el deporte de motor y su legado vivirá más allá de las pistas”.

Mucho más que una atleta
Más allá de sus triunfos deportivos, McGee fue una mentora y un símbolo para mujeres en un deporte históricamente desigual. Su amistad con el actor y entusiasta del motor Steve McQueen la llevó a participar en carreras icónicas como la Baja 500. McQueen, quien la animó a competir, destacó su talento y tenacidad, características que la definieron tanto en las pistas como en su vida personal.
El mundo del motociclismo y el deporte en general despiden a una leyenda cuyo impacto trascendió fronteras. Mary McGee deja un legado inmortal de valentía, superación y pasión, recordándonos que la verdadera grandeza no conoce límites.